Florencia es la ciudad en la que nací, en 1983, y me crié. Allí mismo me gradué en Lingüística Italiana y luego decidí seguir con mis estudios en Bologna, única ciudad italiana con una facultad de Semiótica. Me licencié en esta disciplina que no todos conocen y que se reveló una herramienta de análisis de la realidad increíblemente eficaz. Me dediqué después a una de mis grandes pasiones, los libros, cursando un master en Edición y Redacción y trabajando en varias editoriales en Florencia y en Londres. Mientras tanto empecé mi formación como profesora de Italiano para extranjeros y una vez finalizada me mudé a Valencia para enseñar y a la vez aprender el Castellano.
Después de unos meses tuve la oportunidad de moverme a Barcelona para trabajar en la web de una empresa turística: durante un año fui responsable de crear, alimentar y posicionar una amplia red de blogs, escribir y traducir los contenidos de la web y reorganizar su estructura. También tuve un rol comercial, captando nuevos clientes en Florencia. La experiencia fue muy enriquecedora, me dio la oportunidad de aprender muchísimo sobre SEO y edición de contenidos web y se reveló muy útil en mi siguiente trabajo como responsable de contenidos para Italia en Bodas.net, multinacional catalana de e-commerce y líder mundial en el sector, donde trabajé durante 4 años gestionando un equipo de 5/6 personas y creciendo mucho a nivel profesional y personal.
Hace unos meses decidí hacer un cambio, dejar mi puesto en la empresa y dedicarme a varios proyectos que se iban quedando atrás. En este tiempo he viajado mucho allende el océano, he vuelto a enseñar Italiano y he empezado a colaborar con el fantástico grupo de Apuntes de Acupuntura y One Minute Practice. Son dos proyectos que conocía de antes y que me fascinan mucho, uno porque me vuelve a acercar a la Medicina China, que estudié durante dos años en Florencia, en el curso de Shiatsu del Maestro Bruno Passeri, y el otro porque tuve la oportunidad de probar la eficacia de la respiración y de los micromovimientos a la hora de soltar mis propias tensiones físicas y emocionales.
Perennemente con la música encendida, en la lista de cosas que me encantan no pueden faltar el mar, el chocolate, el periodismo investigativo, las tardes de verano, llegar al porque de las cosas, los perros, las vueltas en scooter y los viajes en coche cantando, los abuelos y sus historias, el contacto con la gente, especialmente aquella con el don de ser a la vez profunda y ligera. Últimamente es muy probable que lleve un diccionario en el bolso, porque con esfuerzo y con amor estoy aprendiendo el griego moderno!